Después de unos meses tranquilos me decidí poner al día en salir y distraerme pero creo que se me pasó la mano. Una semana de juntadas sexuales con amigos y nches sin dormir suadas a un trabajo absorvente y estresante me encuentro un domigo sin energías para nada.
Juro esta semana desintoxicarme y dedicarme al cuidado de mi cuerpecito moribundo.
En cuanto al trabajo de camarero de tiempo completo turno partido y que odio finalmente lo dejo, seria mas digno vivir de la caridad que recibir los insultos constantes de unos gilipollas de cocineros... (aunque el bulling suele ser excitante, hay ciertos limites).
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